Primero que todo, la población debe concientizarse, es decir, los habitantes deben dejar su indiferencia frente a lo que pasa con quienes los rodean.

Absténgase a dar información de horarios, sitios a frecuentar y viajes.

Tenga cuidado con las plantas en las calles, ya que impiden una buena visibilidad y pueden servir de refugio a los delincuentes.

Esté atento a cualquier elemento sospechoso en su cuadra, carros sin placas o con vidrios polarizados; personas desconocidas que merodeen por el lugar o que lo estén siguiendo.

Varíe constantemente su itinerario; evite lugares solitarios y oscuros.

Procure salir a caminar siempre acompañado.

Cuente siempre con algún medio de comunicación de acceso inmediato.